Buenos días, profesor César:
Se realizaron pruebas comparativas con un mortero estandarizado en proporción cemento-arena 1:4 (arena, cemento y agua). La arena utilizada corresponde a un tamiz #30, y el cemento empleado fue de uso general de la marca Argos.
Durante los ensayos de compresión realizados bajo norma a los 28 días, se observó que el mortero tradicional presentó una resistencia promedio de 7,5 MPa, mientras que el mortero con incorporación de cascarilla de arroz alcanzó valores entre 4 y 5 MPa.
Entre las principales ventajas de incluir la cascarilla de arroz se destaca una reducción cercana al 30 % en la densidad respecto al mortero convencional. Esto se debe a la baja densidad del material, que ocupa un mayor volumen en la mezcla y, por tanto, reduce el consumo de cemento y arena. Adicionalmente, la cascarilla presenta propiedades aislantes térmicas, lo que abre la posibilidad de desarrollar materiales con mejor comportamiento térmico.
Dado que las propiedades mecánicas del mortero con cascarilla son inferiores frente al tradicional, su aplicación se ha orientado hacia el diseño y fabricación de elementos no estructurales, tales como basureros, materas y luminarias, donde las exigencias mecánicas son bajas y predominan criterios de sostenibilidad, ligereza y eficiencia en el uso de materiales.