El lema responde a dos aspectos clave: 1) de acuerdo a una noticia publicada el 10 de enero por “Última Hora”, el Ministerio Público de Paraguay cerró el 2023 con 34.898 denuncias por violencia familiar, lo que denota un escalado ascenso desde 2015; 2) los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, que cuenta en el ODS 16 “Paz, justicia e instituciones sólidas” con la meta 16.1 “Reducir significativamente todas las formas de violencia y las correspondientes tasas de mortalidad en todo el mundo”.

Ubicándonos en el contexto local, además de lo mencionado por parte del Ministerio Público sobre las cifras de 2023, hay que tener en cuenta que normativamente Paraguay dispone de la Ley nº 1600 contra la violencia doméstica. En esta, en su artículo 1, establece que dicha ley dispone las normas de protección para “toda persona que sufra lesiones, maltratos físicos, psíquicos o sexuales por parte de alguno de los integrantes del grupo familiar”.

También está vigente la Ley nº 5777/2016 “de protección integral a las mujeres contra toda forma de violencia”. En ella indica, en el artículo 28 inciso “a”, “proteger a la mujer y su grupo familiar afectado que se encuentre en riesgo y desprotección generada por situaciones de violencia”. Alude, además, al MEC, el cual, como entidad que rige la educación, debe ejecutar medidas de prevención como “incorporar la perspectiva de igualdad de derechos del hombre y la mujer, el respeto de los derechos humanos y la formación en la resolución pacífica de conflictos en el currículo educativo de todos los niveles para contribuir a una cultura de respeto en el ámbito familiar, comunitario, escolar, laboral y social como una práctica diaria”. 

Vistas las cifras expuestas por el Ministerio Público de Paraguay, se puede considerar que, a pesar del marco normativo existente, aún es necesario trabajar por la prevención desde una visión integral de lo que somos como personas, es decir, somos cultura, somos educación, somos individualidad, somos diversidad. La prevención debe permear todos los quehaceres diarios de la sociedad, ya que las situaciones de violencia en todas sus formas, y más cuando acontece sobre las mujeres, afecta directamente a la niñez y adolescencia de hoy, la cual es la ciudadanía del presente y del futuro. 

Lo anterior, que permite tener un contexto general, motiva este Encuentro de Investigación en Ciencias Jurídicas Humanas y Sociales, que plantea los siguientes objetivos: