149
Desde el 17 de marzo fecha en que las autoridades de la Universidad Veracruzana dieron
a conocer que en la región Veracruz quedaban suspendidas las actividades presenciales debido
a la contingencia sanitaria por coronavirus COVID-19 y que se debían continuar los cursos vía
remota por diferentes plataformas educativas priorizando el uso de la plataforma institucional
EMINUS sin restringir el uso de recursos y herramientas necesarias que estuvieran al alcance
de docentes y alumnos, empezó una ardua tarea para la comunidad. Se elaboró un espacio
virtual denominado Plan de contingencia COVID19, donde se publicaron diferentes materiales
para facilitar el acompañamiento de académicos y estudiantes a transitar del modelo presencial
al modelo virtual. Entre los apoyos que destacan están: Un documento titulado Estrategias de
Diseño de Experiencias Educativas en Línea, que tiene como objetivo apoyar la planeación y
ejecución de cursos en modalidad virtual; Pautas para la Planeación Flexible de experiencias
educativas, diseñado para enfatizar el saber conocer, hacer, convivir y ser desde ámbitos
presenciales o virtuales; destaca así mismo una guía rápida para la virtualización de
experiencias educativas, un catálogo de actividades asincrónicas; lineamientos para la
evaluación en entornos virtuales; Teams para la continuidad educativa en contextos de
contingencia, entre otros. Se modificaron actividades administrativas, escolares, se habilitaron
recursos digitales y servicios de atención a la salud física, emocional e integral.
Ante este marco, la CEPAL y la UNESCO (2020) señalan que emergieron acciones en el campo
educativo y social:
(...) tres campos de acción principales: el despliegue de modalidades de aprendizaje a
distancia, mediante la utilización de una diversidad de formatos y plataformas (con o
sin uso de tecnología); el apoyo y la movilización del personal y las comunidades
educativas, y la atención a la salud y el bienestar integral de las y los estudiantes (p1).
A pesar de contar con todos estos recursos, no todos los académicos reconocen haber
terminado sus programas de manera satisfactoria, por lo que la intensión de esta investigación
fue conocer los desafíos educativos que tienen los académicos para el próximo ciclo escolar, a
fin de seguir construyendo opciones que permitan la facilitación del proceso educativo en
entornos virtuales sin menoscabo de la formación integral de los estudiantes y sin importar el
tiempo que perdure el periodo de aislamiento social.